Siguiendo los acontecimientos del capítulo anterior, Kirito logra que Eugeo recupere la compostura y ambos pelean juntos contra los Goblins. Finalmente al enfrentarse al líder Goblin, Eugeo termina gravemente herido y ambos recuerdan su pasado juntos, pero un enfurecido Kirito consigue asesinar al líder Goblin con la Espada de la Rosa Azul y hace retroceder a los demás, dejando en libertad a Selka. Después de la batalla, Kirito y Selka tratan de sanar la herida de gravedad de Eugeo antes de que este muera desangrado, sin embargo Selka usa su magia para transferir una pequeña parte de la energía de Kirito a Eugeo y consiguen salvarle la vida.